viernes, 1 de junio de 2012

Bienvenidos



La finalidad de este blog es compartir con todas aquellas personas que aceptan la existencia de Dios y lo reconocen como nuestro padre y creador. Personas con cualquier nivel y tipo de conocimiento que deseen ayudar a otros o necesiten ayuda para distinguir ¿Cual es nuestro verdadero propósito en la vida?. Es un espacio abierto para el conocimiento sano, verdadero y sincero; un sitio con consejos que orienten nuestro camino hacia el continuo crecimiento espiritual y que nos lleve a alcanzar el más ansiado anhelo de las personas: “La Vida Eterna”.

Están todos invitados a publicar en este blog aportes propios o  de otras personas de buena fe, que tengan el deseo en sus corazones de llevar la palabra de Dios a todos aquellos que lo necesitan. 

Nuestro verdadero propósito en la vida (1ra. parte)




Todos tenemos un propósito en esta vida, a todos nos gusta sentirnos vivos y percibir que estamos logrando lo que deseamos y que nuestra vida tiene un verdadero sentido y significado.

Sin embargo lo queramos o no, siempre entramos en un ciclo rutinario: levantarnos, ir a trabajar, momentos de compañía, ocio, diversión y esparcimiento, vida en el hogar, dormir y nuevamente  el ciclo  con muy pocas variaciones. Y en algún momento de nuestras vidas vienen a nuestras mentes ciertas preguntas: ¿ A donde voy?, ¿ Que estoy haciendo con mi vida?, ¿Soy realmente feliz con la vida que llevo?. Estas y muchas otras preguntas, nos harán pensar sobre el verdadero propósito de nuestra existencia,  en la Tierra. Siempre llegaremos a sentir algún vacío que requiere ser llenado o carencias que requieren ser  satisfechas.

Pensaremos en el mundo donde vivimos, el lugar donde nacimos, la familia a la cual pertenecemos, los amigos  que tenemos, nuestra condición social, el nivel de educación, nuestras oportunidades, nuestra calidad de vida, valores, el ciclo de la vida, etc. Surgirán las reflexiones, discusiones, comparaciones sobre  las cosas conocidas y desconocidas, sobre lo bueno y lo malo, lo mejor y peor, la verdad y la mentira, lo justo y lo injusto, la paz y la guerra, la riqueza y la pobreza, lo blanco y lo negro, la materia y el espíritu, lo visible y lo invisible, lo real y lo irreal, la vida y la muerte, el ying y el yang,………

Día a día vamos percibiendo con más intensidad y tratando con cada uno de nuestros problemas existenciales. Siempre encontrándonos a la espera del acontecimiento o hecho que pueda dar  un verdadero significado a nuestras vidas. 

En algún momento se hará presente la gran pregunta         (redactada de diferentes formas pero con un mismo sentido), cuya respuesta, será la luz que nos guíe en el conocimiento sobre el verdadero significado de nuestra existencia: ¿TODO LO QUE EXISTE ES OBRA DE UN SER SUPERIOR, ES DECIR DIOS, EL CUAL NOS CREÓ CON ALGÚN PROPÓSITO EN ESPECIFICO?.

Tan importante es la respuesta, que de la posición y acciones que  adoptemos con respecto a ella, dependerá toda nuestra vida y en consecuencia, el presente y el futuro. Nuestro libre albedrío nos llevará inminentemente por uno de dos caminos: el camino hacia la vida eterna o el camino hacia la muerte eterna. ¿Cuál camino será el que tomarás?. No pierdas tiempo en saber decidir, no vaya a ser, que se te haga demasiado tarde.

Nuestro verdadero propósito en la vida (2da. parte)

Tan importante es la respuesta a la pregunta: ¿TODO LO QUE EXISTE ES OBRA DE UN SER SUPERIOR, ES DECIR DIOS, EL CUAL NOS CREÓ CON ALGÚN PROPÓSITO EN ESPECIFICO?, que de la posición y acciones que  adoptemos con respecto a ella, dependerá toda nuestra vida y en consecuencia, el presente y el futuro. Nuestro libre albedrío nos llevará inminentemente por uno de dos caminos: el camino hacia la vida eterna o el camino hacia la muerte eterna. ¿Cuál camino será el que tomarás?. No pierdas tiempo en saber decidir, no vaya a ser, que se te haga demasiado tarde.

Cualquier diseño o creación requiere indiscutiblemente de alguien que lleve a cabo tal acción, con una finalidad o propósito específico. Quien haya creado el mundo donde vivimos tiene que ser alguien con  una inteligencia  y un nivel  de cultura  muy, pero muy, superior a la nuestra.

Ante ese gran problema existencial, de creer o no creer y de decidir cual es el verdadero camino que debo seguir, el mismo Creador de lo que existe nos dejo el único libro de la antigüedad que nos da las respuestas que estamos buscando: LA BIBLIA.

En este libro el creador se identifica y así pudimos conocer su nombre, para su gloria y la nuestra. En la Biblia  podremos conocer la razón de ¿Por qué existimos?, ¿cual es el verdadero propósito para el cual fuimos creados?.

Así que un buen principio es comenzar a leer con pasión interés, preocupación, paciencia, calma, mente y espiritú abierto, el libro más maravilloso e importante que existe: La Biblia…..La Biblia….. La Biblia….. La Biblia….. La Biblia…..

Piensa que no estas solo en este camino. Únete a los que están transitando por el camino correcto. ¡Ah! otra cosa, aunque no lo creas todavía, Dios te estará acompañando, junto a su hijo Jesucristo y en el momento oportuno te podrás dar cuenta de ello. Permite que se manifiesten en tu vida. Espera y se paciente.

Apresúrate, comienza ya, no pierdas tiempo. Sentirás y veras que vale la pena. Será uno de los hechos más trascendentales e importantes de tu vida. No te niegues este privilegio.   

En Internet podrás tener acceso a miles de recursos que personas de buena voluntad han puesto a disposición nuestra, en forma gratuita. Sino tienes posibilidad todavía de comprar una edición escrita, allí podrás tener acceso a la Biblia en forma electrónica o bajar una copia para su impresión. También existen instituciones que las ofrecen gratuitamente. Usa tu buen criterio para seleccionar lo que más te conviene. Pide a Dios con fe, que te ilumine el camino a seguir.


Introducción General a la Biblia (1ra. Parte)


Una vez que la existencia de Dios ha sido establecida, es lógico pensar que tal Creador-Dios quisiera comunicarse con su creación. La humanidad muestra evidencia de alta inteligencia, bondad, amabilidad, justicia y muchas otras características únicas. Es imposible para el Creador el ser inferior en cualquier manera a Su creación, Así que, alguna forma de comunicación personal entre el Creador inteligente y su creación Inteligente debería de esperarse. Sin comunicación de Dios, ¿cómo la humanidad alguna vez llegaría a saber, o apreciar, ciertos aspectos del Creador, o entender qué el Creador puede requerir de los seres humanos que Él ha hecho? Además, alguna forma de revelación del Creador sería necesaria para instruir a la humanidad en ciertas áreas, tales como las siguientes:

El Carácter de Dios.
Mientras que algo del poder de Dios y su sabiduría puede ser visto en la inmensa y maravillosa complejidad de la creación misma, una comunicación más concreta es requerida para explicar la naturaleza exacta de su carácter.

El Origen de la maldad.
Ya que la humanidad se encuentra a la deriva en un mar de maldad, dolor, y  sufrimiento, eventualmente surgiría la pregunta: ¿Por qué? Esa es la razón por la cual el hombre necesitaba ser educado concerniente a la razón, o razones exactas de su angustia.

El Origen de la Humanidad.
Sin una revelación de Dios, los hombres pueden llegar a la conclusión de que ellos vinieron de “fuerzas accidentales de la naturaleza” en vez de un Creador Todopoderoso. La confusión de las teorías evolutivas del tiempo moderno es evidencia de esto.

El Propósito de la Humanidad.
El hombre—dejado a sus propias ideas—nunca entendería completamente el propósito de su creación. Sin un entendimiento real de su rol, o metas inmediatas o futuras, él vagaría sin objetivo en un mar de incertidumbre.

El Destino de la Humanidad.
Si no hubiera revelación divina, el hombre nunca supiera nada con certeza acerca de la vida después de ésta. Por ende, él puede concluir incorrectamente— como muchos lo han hecho en cada generación— que la vida aquí es todo lo que hay. Si Dios nunca hubiera comunicado a su creación acerca de la vida después de la muerte, la humanidad viviría en desesperación total y temor constante de morir.

Una revelación de Dios puede tomar casi cualquier forma. Dios pudo escoger comunicarse con su creación directamente, palabra por palabra, a través de mensajeros (como ángeles), o a través de sueños o visiones. O para ese fin, él pudo escoger cualquier manera que le conviniese. Históricamente hablando, ha habido dos diferentes tipos de revelación. La Revelación General (o natural) es la que designa la revelación que Dios ha provisto de sí mismo en la naturaleza (vea Romanos 1:20,21, Hechos 14:17, y Salmos 19:1). La Revelación Especial (o sobrenatural) es el nombre que designa a la revelación que Dios ha provisto en la Biblia.

La revelación general llega al hombre a través de la naturaleza. Los primeros seis versículos del Salmo 19 declaran que Dios ha dado una revelación de sí mismo en la naturaleza que constantemente testifica del Creador. En Romanos 1:20, Pablo declaró que “las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se  hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa”.

Las Escrituras enseñan que la revelación general es universal. Nunca en la historia, Dios se ha dejado sin un testimonio de sí mismo (Hechos 14:17). La revelación general es universal tanto en alcance como en territorio. La gloria de Dios puede ser vista cuando quiera y donde quiera que un cuerpo celeste sea observado. Puede ser visto en el brillo de un esplendido arco iris de la tarde, o en las aguas dulces de un suave fluido de un riachuelo a través de la selva tropical. Aunque los hombres a menudo rechazan reconocer y aceptar la revelación de Dios mismo en la naturaleza, ésta sin embargo la sustenta.

Si Dios deseara asegurar resultados a largo plazo con respecto a su comunicación con la humanidad, Él podría hacerlo proveyendo una revelación que fuera tanto permanente como fácilmente accesible. Esto quiere decir que, esta revelación resistiría a la prueba del tiempo y podría ser pasada de generación a generación a través de la historia humana. Esto puede ser logrado produciendo la revelación en una forma escrita que podría ser copiada y distribuida de acuerdo a como se necesite, beneficiando así a toda la gente a lo largo de todas las edades.

Ahora, debemos hacernos la pregunta: ¿Existe alguna evidencia de que tal revelación le ha sido dada a la humanidad? Sí, existe. La evidencia claramente establece que Dios ha dado al hombre una revelación permanente, en forma escrita, en el libro conocido como La Biblia.


Nota: Tomado de Internet. Desconozco el autor. Si alguien conoce la autoria, favor publicarla. Gracias.

Introducción General a la Biblia (2da. Parte).

La Biblia muestra una unidad que simplemente en términos humanos, es imposible de explicar. Para apreciar tal unidad, uno debe entender cómo el Libro fue reunido.

La Biblia fue escrita por más de cuarenta hombres de una variedad de antecedentes. Nehemías fue un mayordomo real. Pedro fue un pescador. Lucas fue un médico. Mateo fue un cobrador de impuestos. Salomón fue un rey. Moisés fue un pastor. Pablo fue un hacedor de tiendas. Estos hombres escribieron en casi toda condición humana. Jeremías escribió con profundo dolor como resultado del rechazo de la gente de Dios para permanecer fiel a Él. David escribió con gran gozo sobre las colinas ondulantes y cubiertas de hierba de Judá. Pablo escribió desde el foso de la desesperación mientras languidecía en una prisión romana.
Estos mas de 40 hombres escribieron en tres idiomas (hebreo, arameo, y griego), en por lo menos dos continentes (Europa y Asia), en un periodo de tiempo que abarcó aproximadamente 1.600 años (1500 A.C. al 100 D.C.) y cubrieron una variedad de temas que incluían psicología, geografía, religión, historia, medicina, y muchos otros.

Siendo todo esto verdadero, uno puede esperar que un grupo de hombres que fue tan diferente, escribiendo tales temas no relacionados, en tan prolongado periodo de tiempo, hubiera producido un libro que fuese una mezcolanza confusa de inconsistencias, errores y disparates. Sin embargo, este no es el caso. De hecho, la verdad es todo lo opuesto. La Biblia muestra tal armonía asombrosa, tal afluencia consistente, y tal unidad impresionante que ninguna explicación naturalista puede dar cuenta por ésta. Es como si la Biblia fuese una sinfonía magnífica dirigida por un solo Conductor. Cada “músico” puede haber tocado un instrumento diferente, en un lugar diferente, en un tiempo diferente, pero cuando el Conductor talentoso combinara los esfuerzos individuales, el final resultaría ser una obra maestra esplendida.

Considere esta analogía. Suponga que usted reuniera cuarenta eruditos contemporáneos con el más alto entrenamiento académico posible, de un solo campo de estudio (por ejemplo, catedráticos con doctorado en historia universal). Suponga, además, que usted los colocara en un cuarto y le pidiera a cada uno de ellos que hiciera un trabajo escrito de veinte páginas de un tema único, las causas de la Primera Guerra Mundial. ¿Qué clase de acuerdo cree usted que existiría cuando todos los trabajos fueran terminados? Probablemente estos cuarenta eruditos no estuvieran de acuerdo en numerosos puntos; sus papeles serían reconocidos más por los desacuerdos que contienen que por los acuerdos. Pero cuando examinamos a los escritores de la Biblia, vemos que no todos ellos vivieron en el mismo tiempo, no todos trabajaron juntos, y algunas veces no se conocieron entre ellos. La mayoría no fue altamente entrenada, y el entrenamiento que ellos tuvieron de seguro no fue en el mismo campo de estudio. Tampoco se les permitió hablar sobre un mismo tema. Sin embargo produjeron un libro que es unido desde el comienzo hasta el final. El libro de 1 y 2 de Crónicas y 1 y 2 de Reyes están de acuerdo el uno con el otro en numerosos eventos históricos. Josué 1 confirma Deuteronomio 34. Jueces 1:1 verifica Josué 24:27-33. Jeremías 52:31-34 verifica 2 Reyes 25:25,27-30. Y así sucesivamente. Esta unidad fascinante, que puede ser vista a través de toda la Biblia, confirma el hecho de que hubo una Inteligencia guiando detrás de esto. Tantos escritores, por tantos años, cubriendo tantos temas, simplemente no pudieron haber estado en tal acuerdo sorprendente por simple coincidencia.

Nota: Tomado de artículo de Internet. Desconozco su autoría. Si alguien conoce el autor agradezco publicarlo en el blog. Gracias.

Listado de los libros de la Biblia

(Diferencias para Hebreos, Protestantes y Católicos)

Dos grandes religiones se rigen por las enseñanzas de la Biblia: la judía y la cristiana, la cual está integrada por católicos, ortodoxos y diferentes denominaciones.

Los judíos sólo aceptan, como es claro, lo que nosotros llamamos Antiguo Testamento y lo dividen en tres grandes partes: "La Ley, los Profetas y otros escritos sagrados". Está compuesta por 24 libros.
 
Para los católicos, la Biblia –Antiguo y Nuevo Testamento está formada por 73 libros: 46 del Antiguo Testamento y 27 del Nuevo Testamento. Los protestantes de las principales denominaciones, sólo aceptan una lista bíblica de 66 libros: 39 del Antiguo Testamento y 27 del Nuevo.



Como se verá, la diferencia entre católicos y protestantes se encuentra, no en el canon o lista de los libros del Nuevo Testamento, sino del Antiguo.

Antiguo Testamento


Para los hebreos solo hay 24 libros en la Biblia, los del AT, agrupados así

Para los Protestantes son 39 libros del AT y 27 del NT (66 en total)


Para la Iglesia Católica son 46 libros del AT 27 del NT (73 en total)

1
Génesis [בְּרֵאשִׂית / Bereshit]
1
1
2
Éxodo [שְׁמוֹת / Shemot]
2
2
3
Levítico [וַיִּקְרָא / Vayikra]
3
3
4
Números [בַּמִדְבַּר / Bamidbar]
4
4
5
Deuteronomio[דְּבָרִים / Devarim]
5
5
6
Josué [יְהוֹשֻעַ / Yehoshúa]
6
6
7
Jueces [שׁוֹפְטִים / Shoftim]
7
7
8

Rut [רוּת / Rut]
8
8
9
Samuel [שְׁמוּאֵל / Shemuel]
9
9
10
10
10
Reyes [מְלָכִים / Melajim]
11
11
12
12
11

Crónicas [דִּבְרֵי הַיָּמִים / Divrei Hayamim]
13
13
14
14
12
Esdras [עֶזְרָא] y Nehemías [נְחֶמְיָה]
15
15
16
16





17






18
13

Ester [אֶסְתֵּר]
17
19





20





21

14
Job [אִיּוֹב / Iyov]
18
22
15
Salmos [תְּהִילִים / Tehilim]
19
23
16
Proverbios [מִשְׁלִי / Mishlei]
20
24
17
Eclesiastés[קֹהֶלֶת / Qohelet]
21
25
18
Cantar de los Cantares [שִׁיר הַשִׁירִים / Shir Hashirim]
22
26




27


28
19
Isaías [יְשַׁעְיָהוּ / Yeshayahu]
23
29
20
Jeremías [יִרְמְיָהוּ / Yirmiyahu]
24
30
21
Lamentaciones[אֵיכָה / Eijá]
25
31




32


22
Ezequiel [יְחֶזְקֵאל / Yejezkel]
26
33

23
Daniel [דָּנִיֵּאל]
27
34
24
Oseas [הוֹשֵׁעַ / Hoshea]
28
35
Joel [יוֹאֵל / Yoel]
29
36
Amós [עָמוֹס / Amós]
30
37
Abdias [עֹבַדְיָה / Ovadia]
31
38
Jonás [יוֹנָה / Yona]
32
39
Miqueas [מִיכָה / Mija]
33
40
Nahúm [נַחוּם]
34
41
Habacuc [חֲבַקּוּק / Javakuk]
35
42
Sofonías [צְפַנְיָה / Tzefania]
36
43
Ageo [חַגַּי / Jagai]
37
44
Zacarías [זְכַרְיָה / Zejaria]
38
45
Malaquías[מַלְאָכִי]
39
46


Nuevo Testamento




Libro
Autor
1
Mateo
2
Marcos
3
Lucas
4
Juan
5
Lucas
6
Romanos
Pablo
7
Pablo
8
Pablo
9
Pablo
10
Pablo
11
Pablo
12
Pablo
13
Pablo
14
Pablo
15
Pablo
16
Pablo
17
Pablo
18
Pablo
19
Pablo (?)
20
Santiago
21
Pedro
22
Pedro
23
Juan
24
Juan (?)
25
Juan (?)
26
Judas
27
Juan

Nota: El N.T. no es aceptado por los Judíos, pero si por católicos y protestantes.